8 de agosto de 2012

CAPERUCITA EN MANHATTAN


Completa con los verbos en imperfecto o indefinido, según corresponda:



El rascacielos donde (VIVIR) ................... Edgar Woolf (SER) .................... suyo todo entero, planta por planta, ascensor por ascensor, ventana por ventana, pasillo por pasillo. El edificio flanqueado por dos callejones de seguridad, en previsión de robos e incendios, (TENER) ........................ forma octogonal, y la parte de abajo, donde (ESTAR) .............................. la gran repostería y encima de ella los salones de té, (CONSTITUIR) ........................... la base más ancha y sólida, reforzada por dieciséis gruesas columnas de mármol color chocolate. Luego aquella base (IRSE) ......................... estrechando progresivamente cada cinco pisos hasta llegar al cuarenta, que (SER) .................. el último. Con este estrechamiento hacia arriba se (LOGRAR) ......................... el efecto óptico deseado por el arquitecto que (IDEAR) ....................... el edificio: es decir, que tuviera, como en realidad (TENER) ..................., forma de tarta. (HABER) ........................... otros detalles ornamentales que (CONTRIBUIR) ......................... a sugerir la impresión de estar ante una tarta gigantesca, como la alternancia de los colores bizcocho, avellana, natillas, fresa, caramelo, turrón y chocolate con el que (ESTAR) ..................... pintadas las paredes de las distintas franjas según se (SUBIR) .................... la vista hasta la terraza octogonal de la cumbre. Esta terraza, lo más llamativo de todo el rascacielos, (ESTAR) ......................... coronada por adornos de grueso cristal policromado imitando diversas frutas, cada cual del color que en realidad le correspondía para dar mayor verismo: plátanos, grosellas, limones, manzanas, cerezas, peras, uvas, naranjas, ciruelas, higos y fresas. (SER) ............... de un tamaño enorme, con el fin de que pudieran ser bien apreciadas desde la calle. Cuando (EMPEZAR) ................................ a caer la noche, mediante un sistema eléctrico que se (CONECTAR) ......................... desde el piso cuarenta con el interior de las frutas, se (ILUMINAR) ................................. éstas, marcadas por unos efectos tan especiales que (SER) ................ habitual encontrarse a grupos de turistas y curiosos congregados en la acera de enfrente del edificio, mirando embobados para arriba y tratando de sacar fotos. Porque los turistas, ya se sabe, lo que quieren no es ver las cosas, sino retratarlas. Las distintas frutas de la terraza se (ENCENDER) ....................... y se (APAGAR) ..................... por turno, como si las estuviera recorriendo un calambre, hasta llegar a un instante de oscuridad total. Luego (VENIR) .................... un estallido más intenso que las iluminaba todas a la vez, mientras del interior de cada una (EMPEZAR) ..................... a salir como un surtidor de pepitas de oro que (DISPARARSE) ...................................... hacia el cielo oscurecido y (CAER) .................. luego como una cascada lenta, chispeante y silenciosa. (SER) ......................francamente espectacular.”


Carmen Martín Gaite, 
Caperucita en Manhattan
(texto adaptado)

Su novela Caperucita en Manhattan se convirtió en el libro más vendido del año 1991; Gaite hacía en esta obra una mezcla entre literatura fantástica, sueño y realidad y el cuento de hadas. Sara Allen es una niña de diez años que vive en Brooklyn, Nueva York. Su mayor deseo es ir sola a Manhattan para llevar a su abuela un tarta de fresa. La abuela de esta moderna Caperucita ha sido cantante de music-hall y se ha casado varias veces. El lobo es míster Woolf, un pastelero multimillonario que vive cerca de Central Park en un rascacielos con forma de tarta. Pero el hilo mágico de este relato se centra en miss Lunatic, una mendiga sin edad que vive de día oculta en la estatua de la Libertad y que sale de noche para mediar en las desgracias humanas o, si es necesario, llegar a regalar un elixir capaz de vencer al miedo.








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